Ni el fin de la Dictadura Militar en Brasil ni la entrega del informe final de la Comisión de la Verdad en 2014, explicando las atrocidades cometidas en el periodo, significaron el fin del sufrimiento de los miles de brasileños que sufrieron abusos tanto físicos como psicológicos durante las décadas más oscuras de la historia del país sudamericano.
Consciente de la necesidad de trabajar con los traumas de las víctimas y proporcionar el apoyo necesario, la Comisión de la Amnistía del Ministerio de Justicia de Brasil creó en 2012 las llamadas Clínicas del Testimonio que desde entonces han suministrado ayuda psicológica a víctimas de la represión a través de sus cinco clínicas en el país localizadas en las ciudades de Río de Janeiro, Sao Paulo, Porto Alegre y Recife.
Además, el proyecto de la Clínicas del Testimonio incluirá acciones públicas para informar a la sociedad brasileña sobre las consecuencias de la Dictadura Militar brasileña así como otros dictaduras de Latinoamérica, como confirmó a la agencia de notícias del PT la coordinadora del Instituto Sedes, uno de los centros adscritos al programa, Maria Cristina Ocariz.
Cabe recordar que el pasado mes de diciembre de 2014, el gobierno de Brasil y el PT culminaron el reto de elaborar un informe definitivo sobre los abusos de la Dictadura Militar a través de la Comisión Nacional de la Verdad, un esfuerzo de más de dos años saboteado continuamente por los sectores más conservadores de la sociedad del país y que dio como fruto una recopilación de las historias individuales de las más de 400 personas desaparecidas durante el periodo.
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