Un histórico tupamaro desaparecido 40 años volvió y contó todo
Se trata de Héctor Amodio Pérez quien fue hasta dado por muerto por los militares. El Movimiento de Liberación Nacional juró vengarse si aparecía. Lo acusaban de traidor por colaborar con la dictadura. Ahora escribió una serie de cartas a los medios para dar su versión.
Héctor Amodio Pérez, en una imagen de archivo.
Volvió como un fantasma del pasado. De la nada y de golpe.
Héctor Amodio Pérez, uno de los fundadores del Movimiento de Liberación
Nacional-Tupamaros (MLN), reapareció tras pasar 40 años en las sombras
sin que nada ni nadie supiera de él. En una serie de cartas enviadas a
varios medios de comunicación dio su propia versión sobre la caída de
aquella organización guerrillera desmantelada en los 70 por la última
dictadura militar en Uruguay.
En marzo pasado, los medios uruguayos El País, La República, Brecha y La Diaria recibieron una carta firmada por el ex tupamaro. Decidieron no publicarla. Amodio Pérez llevaba desaparecido 40 años y hasta había sido dado por muerto por los militares. No se sabía nada del ex guerrillero desde que había sido secuestrado, torturado y luego liberado por la última dictadura en Uruguay (1973-1985).
Acusado por el MLN de ser el máximo traidor de la organización guerrillera de los años 1960 y 1970, Pérez decidió pasar más de cuatro décadas en las sombras. Pero en los últimos tiempos todo cambió. Tras las cartas de marzo, El Observador de Uruguay decidió publicar 15 preguntas dirigidas a Amodio en un intento por corroborar su identidad. Fue el 10 de mayo pasado. El ex tupamaro las respondió y se contactó con el medio para demostrar que estaba vivo.
Según explicó El Observador, luego de mantener “varias conversaciones”; Pérez les confirmó que él había enviado las cartas en marzo y respondió a todas las dudas y acusaciones que pesaban en su contra.
Pérez confirmó que colaboró con los militares uruguayos cuando la caída del MLN era inminente, motivo que le valió la sentencia de muerte de los entonces guerrilleros uruguayos. Lo llamaron traidor y se la juraron. Pero Pérez salió a aclarar que no colaboró con los militares porque su pareja de entonces, la también tupamara Alicia Rey Morales, hubiera sido detenida. “Alicia no fue detenida: se entregó para facilitar la fuga de quienes la acompañaban en esos momentos, entre ellos el actual presidente uruguayo, el señor José Mujica Cordano, en esos momentos el compañero Ulpiano. Si bien el resultado es el mismo, hay diferencias entre ser detenido y hacerse detener para salvar a compañeros”, subrayó.
“El MLN se autodisuelve. Pese a que se dice que estaba desconectado y que no recibía información, participé en varias reuniones donde se discutió qué camino seguir. Siempre propuse replegarnos (…) El MLN estaba liquidado. El resultado hubiera sido el mismo. Quizás las FFAA habrían tardado un mes más, dos, en el mejor de los casos”, dijo para zanjar las acusaciones que señalan que brindó información clave a los militares que permitieron desmantelar a los tupamaros.
Así, Amodio relativizó su colaboración con los militares y aseguró que fue usado como chivo expiatorio para explicar la derrota del MLN, que él atribuye a decisiones militares equivocadas de los principales dirigentes del grupo.
Lo cierto es que las historias alrededor de Amadio Pérez crecieron como hongos. Algunos militares aseguraron que había muerto; otros, que se había escapado; algunos, que era agente del Mossad o de la CIA. El ex guerrillero negó todo con ironías.
¿Qué fue de la vida de Amodio Pérez en este tiempo? Según contó, los militares lo liberaron en Rivera, en la frontera con Brasil, y se fue en un auto. Y aunque no explicó en qué, dijo que se pasó los últimos 40 años trabajando.
“¿Cómo ve actualmente un gobierno liderado por un tupamaro?”, le preguntó El Observador. “Lo veo coherente con la evolución política, no solo de Uruguay sino de América Latina. El triunfo electoral del FA es consecuencia de la suma de todo lo ocurrido por lo menos desde 1960, MLN incluido”, dijo al romper sus 40 años de silencio en un articulo publicado hoy.
Apodado “El Negro”, fue uno de los fundadores del movimiento guerrillero urbano que también integró el actual presidente de Uruguay Pepe Mujica, quien no se ha pronunciado respecto de esta aparición. Tampoco su esposa, Lucía Topolansky. Amodio dirigió la Columna 1 y en 1972 desapareció del mapa, literalmente. Sus ex compañeros le habían puesto precio a su cabeza y él sabía que hablaban en serio. Tuvo que esperar más de 40 años para poder salir de las sombras. Los uruguayos aguardan ahora nuevas revelaciones sobre aquellos años de plomo.
En marzo pasado, los medios uruguayos El País, La República, Brecha y La Diaria recibieron una carta firmada por el ex tupamaro. Decidieron no publicarla. Amodio Pérez llevaba desaparecido 40 años y hasta había sido dado por muerto por los militares. No se sabía nada del ex guerrillero desde que había sido secuestrado, torturado y luego liberado por la última dictadura en Uruguay (1973-1985).
Acusado por el MLN de ser el máximo traidor de la organización guerrillera de los años 1960 y 1970, Pérez decidió pasar más de cuatro décadas en las sombras. Pero en los últimos tiempos todo cambió. Tras las cartas de marzo, El Observador de Uruguay decidió publicar 15 preguntas dirigidas a Amodio en un intento por corroborar su identidad. Fue el 10 de mayo pasado. El ex tupamaro las respondió y se contactó con el medio para demostrar que estaba vivo.
Según explicó El Observador, luego de mantener “varias conversaciones”; Pérez les confirmó que él había enviado las cartas en marzo y respondió a todas las dudas y acusaciones que pesaban en su contra.
Pérez confirmó que colaboró con los militares uruguayos cuando la caída del MLN era inminente, motivo que le valió la sentencia de muerte de los entonces guerrilleros uruguayos. Lo llamaron traidor y se la juraron. Pero Pérez salió a aclarar que no colaboró con los militares porque su pareja de entonces, la también tupamara Alicia Rey Morales, hubiera sido detenida. “Alicia no fue detenida: se entregó para facilitar la fuga de quienes la acompañaban en esos momentos, entre ellos el actual presidente uruguayo, el señor José Mujica Cordano, en esos momentos el compañero Ulpiano. Si bien el resultado es el mismo, hay diferencias entre ser detenido y hacerse detener para salvar a compañeros”, subrayó.
“El MLN se autodisuelve. Pese a que se dice que estaba desconectado y que no recibía información, participé en varias reuniones donde se discutió qué camino seguir. Siempre propuse replegarnos (…) El MLN estaba liquidado. El resultado hubiera sido el mismo. Quizás las FFAA habrían tardado un mes más, dos, en el mejor de los casos”, dijo para zanjar las acusaciones que señalan que brindó información clave a los militares que permitieron desmantelar a los tupamaros.
Así, Amodio relativizó su colaboración con los militares y aseguró que fue usado como chivo expiatorio para explicar la derrota del MLN, que él atribuye a decisiones militares equivocadas de los principales dirigentes del grupo.
Lo cierto es que las historias alrededor de Amadio Pérez crecieron como hongos. Algunos militares aseguraron que había muerto; otros, que se había escapado; algunos, que era agente del Mossad o de la CIA. El ex guerrillero negó todo con ironías.
¿Qué fue de la vida de Amodio Pérez en este tiempo? Según contó, los militares lo liberaron en Rivera, en la frontera con Brasil, y se fue en un auto. Y aunque no explicó en qué, dijo que se pasó los últimos 40 años trabajando.
“¿Cómo ve actualmente un gobierno liderado por un tupamaro?”, le preguntó El Observador. “Lo veo coherente con la evolución política, no solo de Uruguay sino de América Latina. El triunfo electoral del FA es consecuencia de la suma de todo lo ocurrido por lo menos desde 1960, MLN incluido”, dijo al romper sus 40 años de silencio en un articulo publicado hoy.
Apodado “El Negro”, fue uno de los fundadores del movimiento guerrillero urbano que también integró el actual presidente de Uruguay Pepe Mujica, quien no se ha pronunciado respecto de esta aparición. Tampoco su esposa, Lucía Topolansky. Amodio dirigió la Columna 1 y en 1972 desapareció del mapa, literalmente. Sus ex compañeros le habían puesto precio a su cabeza y él sabía que hablaban en serio. Tuvo que esperar más de 40 años para poder salir de las sombras. Los uruguayos aguardan ahora nuevas revelaciones sobre aquellos años de plomo.
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