los No Alineados siguen existiendo

Moore:-Estados Unidos necesita su energía para reponerse de tantos desaguisados, y redefinirse ahora que el mundo tiende a la multipolaridad

120 PAISES ENVIARON REPRESENTANTES DE ALTO NIVEL A LA REUNIÓN DE NO ALINEADOS EN TEHERAN LA SEMANA PASADA

Por Walter Moore

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Los datos mínimos aparecidos sobre este evento en los medios de desinformación describían a este evento como “anacrónico”.

Pero resulta que sobre 193 países afiliados a la ONU, 120 concurrieron y 29 fueron encabezados por sus primeros mandatarios.

Lo hizo el primer ministro de la India, Manmohan Singh, el nuevo presidente de Egipto Mohamed Mursi, el de Pakistán, Asif Ali Zardari, y los primeros ministros de Irak, Nuri al Maliki, y de Siria, Wael al Halaqi

La monarquía de Catar está representada al máximo nivel con el emir Ahmad Ben Jalifa Al Thani. Y entre los aliados tradicionales de Irán, los presidentes de Sudán, Omar el Beshir, y Zimbabue, Robert Mugabe, están presentes y Corea del Norte envió al jefe del Estado Kim Yong-Nam. 

En fin un total de 29 jefes de Estado para impulsar la unidad de los países de Oriente Medio. Pero no sólo concurrió el Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, sino que un tradicional aliado de Occidente y de Israel, como el poderoso Egipto, tuvo un rol relevante, y ha dado un giro en su política con su reconciliación con Irán, que designó a un embajador en Egipto después de 30 años de incomunicación oficial.

Esta reunión implica un fuerte fracaso en la política occidental de dejar aislado a Irán, y por suerte para la Argentina, nuestra ausencia no ha sido demasiado notable puesto que de América Latino solo enviaron representantes Venezuela y Cuba. 

Considerando la historia de la Argentina como promotora del Movimiento de No Alineados, parece razonable que se abandone de una buena vez la operación contra Irán, impulsada por Israel en nuestro país.

Israel ahora está perturbado por la presencia en Irán del Presidente de Egipto, que se suma a la invitación al líder de Hamas en Gaza, movimiento que prácticamente ha desplazado del poder político a su rival en Cisjordania.

Sentarse a conversar, a revisar sus ancestrales diferencias, a establecer cuáles son vigentes, y cuales se sostienen por las operaciones de sus enemigos, implica un profundo cambio en la política de esa región permanentemente convulsionada.

Ahora es Alemania la que fogonea los conflictos, porque Estados Unidos ha encontrado una solución para su permanente voracidad por la energía: Las reservas de Shale Gas y petróleo descubiertas y puestas en operación dentro de su territorio, le garantizan la energía necesaria hasta fin de este siglo. En otras palabras, ya no los llevará la desesperación por el petróleo a una nueva conflagración.

Estados Unidos necesita su energía para reponerse de tantos desaguisados, y redefinirse ahora que el mundo tiende a la multipolaridad, y abandonar el Imperio para mirarse como una Nación con muchos problemas graves.

Ese no es el caso de Alemania, cuyo complejo fabril, o sea la oligarquía dominante, se ocupa de la química y los medicamentos, corporaciones en pleno proceso de descomposición por haber puesto su futuro en manos del crecimiento de la enfermedad, a contrapelo con la Historia y de los avances del saber humano.

No es de extrañar que las vinculaciones del Premier israelí con la industria químico-farmacéutica alemana, tengan mucha influencia en sus pasos futuros.

¡Cambia! ¡Todo cambia!

Y cambia muy rápido.

Debemos despejar la cabeza de las ideas del siglo pasado.

Este es otro milenio y todo es, y será, muy diferente.