El Pentágono participó en la planificación de la nueva ofensiva fracasada contra Al Hudaidah
El portavoz de las Fuerzas Armadas de Yemen, Yehya Sari, dijo el jueves (8 de noviembre) que el Ejército y los combatientes de Ansarullah habían logrado cortar todas las rutas de suministro por tierra a las fuerzas enemigas en el frente de la costa oeste.
Él añadió que las tropas enemigas están ahora rodeadas en las regiones de Al Yabalia, Al Fazza, al Yah y la ciudad de Tahtiya.
“La aviación de la coalición saudí-estadounidense no pudo proporcionar refuerzos a los mercenarios; solo pudo evacuar a los heridos, mientras que decenas de cadáveres quedaron abandonados en el campo de batalla”, dijo el general Sari.
“Las operaciones militares llevadas a cabo por nuestras fuerzas llevaron a la destrucción de 17 vehículos”, reportando 150 mercenarios muertos y heridos.
En este contexto, él llamó a los mercenarios engañados para que se rindieran a las fuerzas yemeníes.
Los planificadores del Pentágono planearon el nuevo ataque a Hodeida.
En otro nivel, el sitio francés Intelligence Online reveló el jueves 8 de noviembre que los líderes del Pentágono participaron en la planificación de la nueva ofensiva saudí-emiratí contra Al Hudaidah.
El Pentágono, en este sentido, ha proporcionado información ultra sensible a Arabia y los Emiratos Árabes Unidos.
Oficiales estadounidenses se reunieron en Riad con oficiales saudíes y emiratíes para planificar la ofensiva contra Al Hudaidah, dijo la fuente.
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